Con la intención de que durante los próximos años se cuente con un panorama de todas las edificaciones y sitios de valor patrimonial existentes en el país, con antecedentes de su historia constructiva, materialidad, estado de conservación y ubicación georreferenciada, entre otros, el Ministerio de Obras Públicas dio a conocer la publicación de los primeros inventarios regionales de patrimonio cultural inmueble correspondientes a Atacama, Valparaíso, Ñuble y Aysén.
El Seremi de Obras Públicas de Atacama, Mauricio Guaita Juantok, asistió a la presentación de estos documentos que se realizó la semana pasada en el Edificio Moneda Bicentenario en una ceremonia liderada por el equipo de la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas y el Subsecretario de Desarrollo Regional, Miguel Crispi, que también contó con la participación de Seremis de las otras 3 regiones y especialistas en patrimonio arquitectónico, quienes posteriormente asistieron a una charla magistral dictada por Eduardo Rojas, experto en conservación del patrimonio de la Universidad de Pensilvania, seguido de un conversatorio con los arquitectos que encabezaron los inventarios de cada región.
Estas investigacionesimpulsadas por la Dirección de Arquitectura del MOP permitieron la identificación y registro de 3.613bienes culturales inmuebles y 481 áreas de valor patrimonial en esas cuatro regiones, que comprenden tipologías como edificios, viviendas, estructuras industriales, asentamientos de pueblos originarios, recintos religiosos, memoriales y cementerios, entre otros. La información recopilada será integrada a una geodatabase que posibilitará a los gobiernos regionales, a los municipios y al gobierno central una adecuada priorización de las próximas iniciativas de inversión en el ámbito patrimonial desde una mirada analítica y territorial.
En su intervención en esta actividad, el Subsecretario de Desarrollo Regional, Miguel Crispi Serrano, aseguró que “como Gobierno vamos a recoger lo bueno que se ha hecho, darle prolongación y continuidad a nuestra historia, y nuestra historia es nuestro patrimonio. Porque el bienestar no es solamente el acceso material a servicios básicos, que es nuestra primera urgencia como Gobierno, sino que también el acceso al patrimonio y a la identidad. Desde lo que somos construir un país más digno, más justo, un país al alcance y del cual todas y todos nos sintamos orgullosos”.
El Seremi Guaita, señaló, “estoy muy honrado de participar en esta actividad y recibir el libro físicamente, el cual se puede descargar a través del código Qr o de las plataformas digitales enhttps://arquitectura.mop.gob.cl/patrimonioinmueble/Paginas/indice.aspx. En el caso de Atacama, se destacan 375 inmuebles y tal como lo dijo el expositor Eduardo Rojas, si nos coordinamos bien, esto se podría desarrollar en un futuro cercano, ponernos de acuerdo en un modelo de gobernanza, de poder estar involucrados con los actores relevantes de las comunas, como los municipios, la sociedad civil y quienes inciden en el tema”.
“Hoy hay una postura el gobierno regional de apoyar las iniciativas que rescaten el valor cultural de nuestra región y que mejor que con este inventario actualizado del patrimonio, que nos permita tomar decisiones en torno a la historia que tiene la región de Atacama, la riqueza histórica que tiene el mineral del Chañarcillo, entre otras para que sea insumo de poder inyectar los recursos dado la necesidad de restauración o de recate patrimonial”, indico el Seremi del MOP Atacama.
La realización de estos cuatro inventarios regionales, cuya publicación impresa totaliza más de 8.200 páginas repartidas en 21 volúmenes, implicó un acucioso trabajo de campo, de investigación previa y visitas a terreno, que incluyeron reuniones con diversas organizaciones y la realización de participaciones ciudadanas. La contribución de la comunidad para registrar la memoria colectiva fue una de las principales fuentes de información para lograr identificar de la manera más precisa posible cada inmueble, sitio y área incorporada en este estudio.
En ese sentido, para la jefa del Subdepartamento Técnico de Patrimonio de la Dirección de Arquitectura, Carolina Aguayo Rojas, “el inventario es una importante herramienta de gestión en los territorios para las autoridades, necesaria para la toma de decisiones y la planificación de los proyectos de recuperación que se decidan impulsar. Asimismo, se constituye como una fuente de conocimiento para las comunidades y para el mundo académico, lo que facilitará su comprensión en una dimensión territorial, temporal y física, siendo de utilidad para formular planes concretos de salvaguardia de este patrimonio”.
El desarrollo de cada inventario consideró la realización de un análisis histórico-territorial para identificar distintas líneas temáticas patrimoniales que contribuyen a determinar la identidad de cada región, seguido de un catálogo con cada inmueble y área de valor patrimonial. En estas fichas se incorporaron antecedentes como dirección, propietario, tipo de propiedad, protección patrimonial, uso actual, usos anteriores, materialidad, datos históricos, estado de conservación, identificación de sus valores y atributos patrimoniales, así como información complementaria respecto a si el bien cultural está ubicado en un área protegida o amenazada o si está vinculado a manifestaciones de patrimonio inmaterial, entre otras variables.
Este catastro de inmuebles y lugares patrimoniales significa una actualización y ampliación del catastro efectuado por la Dirección de Arquitectura del MOP en el año 2000, el cual sirvió de base para determinar la mayoría de las restauraciones patrimoniales que el Estado ha impulsado en las últimas dos décadas. En ese sentido, estos nuevos inventarios permitirán definir cuáles construcciones requieren intervención en cada región y así dar inicio al proceso de formulación de las iniciativas respectivas.
Esta investigación continuará próximamente con otras siete regiones (Arica y Parinacota, Antofagasta, O’Higgins, Maule, Biobío, Los Lagos y Magallanes), en la medida que se vayan aprobando los recursos financieros de cada consultoría.
Fuente: MOP Atacama