Este martes habrá una reunión clave en Asunción en la que se analizará la viabilidad de la final de la Copa Libertadores en Santiago fijada para el próximo 23 de noviembre en el Estadio Nacional.
Todo indica que finalmente el organismo sudamericano decidirá trasladar la sede del encuentro entre River y Flamengo, a raíz de las movilizaciones y crisis social que aún se sigue viviendo en la capital chilena.
“Si no somos capaces de reanudar el Torneo, sería irresponsable pretender hacer la Libertadores”, señaló ayer tajantemente el Intendente Felipe Guevara. Y al parecer sus dichos encontraron eco en la prensa argentina y brasileña.
“Libertadores: La tendencia es el 30 en Asunción”, tituló el diario Olé, agregando que “el estallido social en Chile, con epicentro en la capital, no afloja: este lunes hubo cientos de miles de manifestantes en la Plaza Italia que pidieron por la renuncia del presidente Sebastián Piñera y se bancaron otra represión de los carabineros y hasta un sismo de 6.3 en la escala Richter que se registró durante otra marcha en reclamo por los derechos del pueblo chileno. El contexto no da para pensar en fútbol, claro. Tampoco para jugarlo”.
La misma publicación viene acompañada de imágenes de los enfrentamientos entre efectivos policiales y manifestantes. Además, el mismo medio realizó una encuesta en la que el 75% de los cibernautas cree que “es irresponsable” jugar el compromiso en Santiago.
“En lugar de aplacarse, el reclamo social escala. Y ayer, además, un terremoto de 6,1 grados sacudió seis regiones del centro y el sur de Chile, incluida la capital. Los planes distintos aparecen en el horizonte de la final”, comentó el diario La Nación.
“Mudanza a la visita”, tituló Globo Esporte de Brasil, publicando que “Conmebol evalúa posponer la final hasta el 30 o llevarla a Asunción”.
En esa misma línea, el rotativo postula incluso al nuevo recinto que acogerá el choque entre millonarios y cariocas.
“Es posible que la final de Libertadores se reprograme para el 30 de noviembre, también un sábado, para el estadio General Pablo Rojas, apodado “La Nueva Olla”. Dentro de Conmebol, una fuerte corriente aboga por un cambio de lugar, pero no una fecha”, puntualizó.
De esta manera, en Argentina y Brasil prácticamente le bajan el pulgar a la sede chilena y se la juegan a sólo horas de la reunión clave que se sostendrá esta tarde en Paraguay.
Fuente: emol
