Pasado algunos días luego de la subsidencia ocurrida en Tierra Amarilla, autoridades comunales y regionales se han hecho cargo de la preocupación constante de los vecinos de la comuna, y que se ha acentuado en las últimas jornadas.
Luego de un recorrido por el sector del socavón que en una última medición mantenía un diámetro de 32 metros en superficie, 48 en su base y 64 de profundidad, el gobernador regional, Miguel Vargas sostuvo que, a pesar de que se están realizando los estudios pertinentes al hecho ocurrido el fin de semana pasado, se deben continuar con nuevos estudios, y es por eso comprometió recursos para esto.
La autoridad atacameña indicó que, en el año 2014 se realizó un estudio del subsuelo tierramarillano, tras un evento parecido, pero en otro punto de la comuna, y arrojó que la situación se produjo por un hecho particular. Sin embargo, la sensación de inseguridad se mantiene, lo que impulsa la necesidad de actualizar los datos para la tranquilidad de la población.
Solicitud que hace extensiva el alcalde Cristóbal Zúñiga, incluso indicando que estas deben ser constantes.
Si bien no se precisaron detalles sobre el estudio en profundidad que financiaría el Gobierno Regional, por el momento el Sernageomin a través de una serie de profesionales, que incluyen un geólogo, un ingeniero civil en minas, ingeniero geomensor, y un geomecánico del nivel central se encuentran realizando el reporte técnico para conocer el origen de esta subsidencia
