El presidente boliviano, Evo Morales, decidió este domingo convocar a nuevas elecciones generales y renovar la totalidad de magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE), después de conocerse un informe de auditoría de la OEA que invalida los comicios del 20 de octubre.
“He decidido renovar la totalidad de vocales del tribunal supremo electoral”, dijo el gobernante que aspira a un cuarto mandato en un anuncio por televisión.
Subrayó que la idea es “convocar a nuevas elecciones nacionales, que mediante el voto, permitan al pueblo boliviano elegir democráticamente a nuevas autoridades”, añadió.
Un informe preliminar de la Organización de Estados Americanos OEA, difundido este domingo, estableció que “no puede validar los resultados de la presente elección, por lo que se recomienda otro proceso electoral”, al establecer irregularidades en el conteo de votos.
MANIPULACIÓN DE RESULTADOS
El informe de la auditoría realizada por la OEA sobre la elección general en Bolivia el 20 de octubre describe irregularidades por las que recomienda que “debe ser anulada” y convocar a nuevos comicios “confiables”, con un órgano electoral de “nueva composición”.
El conteo final del Tribunal Supremo Electoral (TSE) atribuyó a Morales un 47,08% de los votos y al opositor Carlos Mesa el 36,51%, con una diferencia mayor al 10%, que le dio al mandatario el triunfo en primera vuelta, habilitándolo para un cuarto mandato hasta 2025.
Pero la indagatoria de los observadores del organismo observador, entre sus principales puntos, señala lo siguiente:
1.- El equipo auditor no puede validar los resultados de la presente elección, por lo que se recomienda otro proceso electoral. Cualquier futuro proceso deberá contar con nuevas autoridades electorales para poder llevar a cabo comicios confiables.
2.- El proceso electoral debe comenzar nuevamente, efectuándose la primera ronda tan pronto existan nuevas condiciones que den nuevas garantías para su celebración, entre ellas una nueva composición del órgano electoral.
3.- En los cuatro elementos revisados (tecnología, cadena de custodia, integridad de las actas y proyecciones estadísticas) se encontraron irregularidades, que varían desde muy graves hasta indicativas. Esto lleva al equipo técnico auditor a cuestionar la integridad de los resultados.
4.- Teniendo en cuenta las proyecciones estadísticas, resulta posible que el candidato Morales haya quedado en primer lugar y el candidato Mesa en segundo. Sin embargo, resulta improbable estadísticamente que Morales haya obtenido el 10% de diferencia para evitar una segunda vuelta”.
5.- Las manipulaciones al sistema informático son de tal magnitud que deben ser profundamente investigadas por parte del Estado boliviano para llegar al fondo y deslindar las responsabilidades de este caso grave.
6.- La existencia de 1.575 actas TREP (sistema de conteo rápido, NDR) en el cómputo final, corresponde a un aproximado de 350 mil votos. El margen de victoria en primera vuelta es menor a 40 mil votos. “Por lo tanto, una irregularidad de estas dimensiones es determinante para el resultado. Por estas razones el equipo auditor no puede validar una victoria en primera vuelta”.
7.- En el último 5% del cómputo, 290.402 votos fueron contabilizados. De estos, Morales ganó 175.670, es decir un 60,5% de los votos, mientras Mesa obtuvo solamente 69.199 votos es decir un 23.8%. En otras palabras, “en el último 5% de votación, Morales incrementa el promedio de votación en un 15% comparado con el 95% anterior, mientras Mesa cae en una proporción prácticamente igual. Este comportamiento es muy inusual”.
8.- “La existencia de actas físicas con alteraciones y firmas falsificadas también impacta la integridad del cómputo oficial”.
FUENTE LA NACIÓN