A pesar de lo ocurrido, Miguel Niño dice sentirse apoyado por el nuevo establecimiento educacional en el que trabaja: “Volver a enseñar en el aula me ha ayudado mucho”, dijo.
El profesor Miguel Niño Ríos no olvidará lo que le ocurrió el 30 de octubre de 2023 en el Liceo Centro Educacional Municipal de San Ramón, donde trabajaba.
Tras reunirse con uno de sus estudiantes de 17 años y su madre, por el bajo rendimiento académico del alumno que lo hacía estar en riesgo de repetir, el alumno lo atacó por la espalda provocándole graves lesiones: fracturas abiertas de un tercio medio en la cara.
La gravedad de las heridas hizo que en noviembre del año pasado Niño debiese ser sometido a una cirugía de reconstrucción facial. En tanto, el atacante fue expulsado del colegio.
El pasado 16 de octubre el Sexto Tribunal Oral en lo Penal de Santiago condenó al estudiante, hoy ya mayor de edad, a dos años de internación en un régimen semicerrado de un programa de reinserción social.
Profesor volvió a enseñar tras el ataque
A un año del hecho, Las Últimas Noticias conversó con Niño, quien confidenció que tras largos meses de terapia volvió a enseñar. Empezó en marzo, aunque en otro colegio de San Ramón. Les hace clases a estudiantes de quinto y sexto básico, además de tercero y cuarto medio: “No podía volver a mi antiguo colegio, necesitaba un nuevo espacio para seguir adelante”, dijo.
El docente manifestó que vivió con mucha angustia el juicio, ya que tenía que relatar nuevamente la experiencia que vivió y dijo que esperaba una condena mayor para su agresor.
Además, precisó que no ha superado aún ciertas consecuencias del ataque: “Ha sido difícil, porque quedé marcado. Me cuesta confiar. A veces me da miedo dar la espalda y hay momentos en los que quisiera salir corriendo y gritar, pero el ambiente ahora es muy distinto; me han apoyado mucho”, precisó.
Para finalizar, Niño aseguró que a pesar de lo ocurrido, aún le gusta ser docente: “Volver a enseñar en el aula me ha ayudado mucho. Ahora veo que muchos estudiantes quieren aprender y me respetan. Mis colegas también han sido muy amables y comprensivos conmigo. Eso hace que la carga sea más llevadera, porque veo que realmente les interese lo que tengo para enseñar, y eso es agradable”, sentenciar.
Fuente: T13