Hace un año, en la primera cuenta pública, la “gran tarea” para el Presidente Gabriel Boric, era “recuperar la paz y estabilidad”. En esa oportunidad, el discurso fue más una “hoja de ruta” que un listado de aciertos y errores ya que llevaba un poco más de dos meses en La Moneda.
En ese entonces, Boric llegó precedido por una brusca caída del respaldo a su gestión según diversas encuestas, marcado en parte por la violencia en la macrozona sur, la inseguridad y la alta inflación.
El discurso se basó en cinco ejes: derechos sociales, mejor democracia, justicia y seguridad, crecimiento inclusivo y medio ambiente. Asimismo, se refirió al proceso constituyente, que meses después fracasó en el Plebiscito del 4 de septiembre.
El próximo 1 de junio el Mandatario volverá al Salón de Honor del Congreso Nacional para dirigirse por segunda vez a la nación, a más de un año de haber asumido como Jefe de Estado. En esta oportunidad, analistas prevén un discurso conciliador para aunar mayorías tanto en las fuerzas políticas como en la ciudadanía, en un escenario político polarizado tras dos elecciones.
Marco Moreno, analista y académico de la Universidad Central, sostuvo que el contexto político “está dominado por el clivaje del apruebo y el rechazo que tendió a revivirse el pasado 7 de mayo”, según él, existe una cierta continuidad en el electorado chileno desde el Plebiscito de salida que terminó con la propuesta de Nueva Constitución y los resultados de la última elección, donde se impuso con gran fuerza el Partido Republicano.
Asimismo, identificó en este nuevo escenario político “la irrupción de nuevos electores que no habían participado de procesos anteriores y una alta volatilidad. Está fuertemente marcado por una ciudadanía más crítica, exigente y pesimista”.
Para Moreno, “la ciudadanía evaluará al Gobierno en función del los resultados”, aunque advirtió que en el primer año “no hay muchas cosas que mostrar”.
Señaló que el proyecto de 40 horas, el copago cero de Fonasa, la Estrategia Nacional del Litio y la política de autocuidado, “pueden ser los únicos logros que el Presidente Boric pueda mostrar” y dijo que “la ciudadanía juzgará en relación a esos elementos”.
Sobre el tono de la alocución, el académico planteó que seguramente llamará a la unidad.
“Es un Gobierno que no tiene mayoría para gobernar (…) ya no solo no cuenta con los votos en el Congreso, si no que tampoco tiene una aprobación en la ciudadanía, mas que el votante duro que no sobrepasa el 30%”, agregó.
En esa línea, indicó que “será un discurso mas conciliador, el Presidente debe construir esa mayoría política y recuperar la mayoría social en poco tiempo, antes del plebiscito y de las elecciones municipales y de Gobernadores Regionales del próximo año”.
El analista político Tomás Duval advierte un contexto político “complejo” producto de las dos derrotas electorales y “muchas dificultades para enfrentar adecuadamente la agenda pública”.
Identifica dos desafíos importantes: dar cuenta de lo realizado y delinear una ruta clara para el Gobierno. “Estos es conciliar el programa de Gobierno con una agenda política y pública que hasta ahora le ha sido casi imposible construir”, señaló en analista.
“Eso incluye definiciones sobre cuáles serán la políticas públicas que serán eje en este segundo año y la viabilidad política de implementar las mismas. Para ello deberá dar señales que permitan un clima político que sea propicio para buscar acuerdos transversales en ciertas materias”, agregó.
Duval plantea que será muy importante el tono, ya que “es evidente que sus coaliciones políticas están tensionadas por el programa de Gobierno y tiene una oposición que se ha fortalecido tras las elecciones”.
“Desde un punto de vista político será necesario mirar con atención por ejemplo las señales que dará respecto al proceso constituyente y a la conmemoración de los 50 años del Golpe de Estado“, agregó.
Por su parte, el académico del Centro de Análisis Politico de la Universidad de Talca, Mario Herrera, planteó que -con la baja aprobación que tiene el Mandatario- esta será una oportunidad para “reconectar con la ciudadanía” y “con las demandas mayoritarias que lo llevaron a ganar la segunda vuelta presidencial”.
“Eso no significa volver a los orígenes y refugiarse en Apruebo Dignidad, sino que entender que el contexto de Chile es distinto”, explicó.
Para Herrera, el Presidente deberá “defender los avances que ha tenido hasta el momento”. Y en ese contexto, prevé que la agenda de seguridad y económica deberían ocupar un gran espacio durante la alocución.
Sobre el tono, sostuvo que tendrá que ser “muy similar al discurso después de la derrota en el Consejo Constitucional”, es decir, “más conciliador” y “abierto a la autocrítica”. En esa línea, el analista planteó que es una oportunidad para impulsar “la construcción de mayorías”.
Fuente: Emol.com
