Con el propósito de prevenir la entrada de plagas agrícolas de importancia a nuestra región el Servicio Agrícola y Ganadero, SAG, inició en estos días la instalación de trampas y emisores de feromonas en las provincias de Copiapó y Vallenar como herramientas de control para la polilla del racimo de la vid (Lobesia botrana), insecto que afecta especialmente a las uvas, ciruelas y arándanos.
Dicha plaga, que causa la pudrición de la fruta, es detectada cada temporada en poblaciones menores en la región, siendo transportada desde la zona central del país, donde se encuentra establecida. Por ello, el objetivo del SAG es impedir que afecte la producción frutícola regional, en especial la uva de mesa, principal cultivo de la zona.
Son 790 las trampas tipo delta cuya instalación partió esta semana en Copiapó y comunas de la provincia, mientras que durante la mañana de este sábado 10 de agosto se instalarán emisores de feromonas en sectores de las poblaciones El Palomar, Juan Pablo Segundo y callejón Pedro de Valdivia, lugares que son priorizados debido a detecciones anteriores en la capital regional.
En tanto, en Vallenar y demás comunas están siendo instaladas 225 trampas en distintos puntos, además de emisores en la población Baquedano y sector El Jilguero de esta ciudad, tarea que se inició el día de hoy.
Fue Carolina Pizarro Figueroa, encargada regional de Protección Agrícola, Forestal y Semillas del SAG, quien se refirió esta labor en Vallenar en primera instancia. “A partir del día de hoy jueves el SAG va a comenzar la instalación de emisores de confusión sexual para el control del racimo de la vid. Estaremos con nuestros funcionarios en el sector de Baquedano. Se solicita a la comunidad que no los saque. Esta instalación se replicará en la ciudad de Copiapó a partir del sábado, donde estaremos en tres sectores”, informó.
En tanto, Mei Maggi Achu, directora regional del SAG, indicó que tanto trampas como emisores son colocados por inspectores/as del SAG, debidamente identificados, por lo que solicitó a vecinos y vecinos dar las facilidades para colgarlos en árboles, arbustos o estructuras de madera, manteniéndolos en su lugar hasta que sean retirados por el mismo Servicio.
Añadió que los emisores son dispositivos plásticos de color rojizo semejantes a un ramillete o estrella, que emiten al ambiente feromonas específicas para este insecto, impidiendo su reproducción. No son insecticidas y no son nocivos para la salud humana, animal o vegetal. Sin embargo, para asegurar su efectividad, se solicita a las personas que no los manipulen hasta el final de la temporada.
En caso de cualquier duda o inquietud las personas pueden contactarse con las oficinas del SAG en Copiapó y Vallenar, o escribir un correo a contacto.atacama@sag.gob.cl
Cabe destacar, que las zonas urbanas de Copiapó y Vallenar se mantienen como áreas cuarentenadas para esta plaga, producto de detecciones anteriores. Ello implica regulaciones y medidas fitosanitarias obligatorias para comercializadores, transportistas y productores de vides, ciruelas y arándanos, establecidas en el marco de la estrategia del Programa Nacional de Lobesia Botrana, que apuntan a evitar la dispersión del insecto y resguardar el patrimonio fitosanitario nacional.
