Aunque un gasto pequeño no afecta gravemente la economía personal, la acumulación de distintos gastos hormiga puede terminar teniendo un peso significativo.
La próxima semana comienza marzo, un mes marcado por cobros como la escolaridad y el permiso de circulación, momento en que aumentan los gastos mensuales. Para mantener una economía personal saludable es necesario tener bajo control los denominados gastos hormiga.
Los gastos hormiga son pequeños desembolsos que realizamos de manera espontánea y cuya suma, a lo largo del tiempo, puede tener un impacto considerable en nuestras finanzas.
Estos suelen ser compras de bajo monto y cotidianas, como el café de la mañana o el pedido de delivery, que en el día a día pasan desapercibidas al no estar contempladas en el presupuesto. Aunque un gasto pequeño no afecta gravemente la economía personal, la acumulación de estos desembolsos puede terminar teniendo un peso significativo.
¿Cómo controlar los gastos hormiga?
1. Identificarlos: Analiza tus hábitos de consumo y clasifica tus compras entre prescindibles e indispensables. Esto te permitirá visualizar cuáles son esos pequeños gastos que, aunque parezcan inofensivos, se acumulan rápidamente.
2. Registrar los gastos: Si es la primera vez que llevas un control de tus gastos hormiga, anótalos diariamente en una agenda o aplicación, indicando el concepto y el monto. Así, al final del mes, sabrás cuánto representan en dinero y podrás ajustar tu presupuesto en consecuencia.
3. Establecer un límite: Una vez que hayas identificado y registrado tus gastos, establece un límite mensual para este tipo de compras. Incluirlos en tu presupuesto te ayudará a mantener un mejor control y evitar desajustes financieros.
Desde Equifax, líder en soluciones de información crediticia, enfatizan que aplicar estos tips permiten optimizar el presupuesto y también fomenta hábitos de consumo más conscientes y responsables.
FUENTE T13