- Con esta innovadora metodología ha rehabilitado más de 3 mil metros de colectores en el último año, contribuyendo a reducir las tasas de obstrucciones.
Buscando generar el menor impacto posible en las ciudades, Nueva Atacama desde su llegada a la región, implementó la innovadora tecnología CIPP, la cual permite rehabilitar las redes de alcantarillado sin necesidad de realizar excavaciones ni interrumpir el tránsito vehicular.
El gerente regional de la sanitaria, Marcelo Basaure Ugarte, destacó que esta innovadora metodología optimiza la calidad del servicio, garantizando una vida útil de al menos 50 años para los tramos rehabilitados, renovando la infraestructura sin afectar el entorno.
“Los trabajos de rehabilitación de redes de alcantarillado sin zanja se realizan mayoritariamente de noche y nos permiten crear un nuevo colector de forma silenciosa gracias a que no requiere romper vía pública y no hay afectación al tránsito vehicular ni a los vecinos del sector”, enfatizó el máximo ejecutivo de Nueva Atacama.
Según lo explicado por Basaure, el proceso de rehabilitación es rápido y eficiente “en primer lugar, se introduce una manga plástica dentro de la cámara de alcantarillado, recorriendo todo el interior del colector hasta la cámara siguiente del tramo a rehabilitar. Luego, se aplica calor y presión de aire, lo que provoca la expansión de la manga, que, gracias a la temperatura, se adhiere a las paredes interiores, generando un nuevo tubo”.
“Posteriormente, mediante un robot georreferenciado perforamos las uniones domiciliarias, es decir, los puntos donde se conectan las descargas de aguas servidas de los hogares. Finalmente se lleva a cabo una teleinspección para certificar que la intervención se haya ejecutado correctamente”, explicó.
Impacto positivo en cifras
El impacto positivo de esta tecnología es evidente, así lo reafirmó el gerente regional de Nueva Atacama “hasta el momento, sumados a los trabajos realizados en 2024, hemos completado casi 3.000 metros de rehabilitación en Vallenar, Copiapó, Caldera, Chañaral, Tierra Amarilla y otras localidades de Atacama. Esto nos permite reducir la tasa de obstrucciones de los alcantarillados en al menos un 16% y garantiza que estos tramos de colectores tengan al menos 50 años más de vida útil, mejorando la calidad del servicio para los vecinos de las zonas intervenidas”.
Desafíos en el uso adecuado del sistema de alcantarillado
El cuidado y mantenimiento de las redes de alcantarillado es fundamental para evitar inconvenientes como los reboses y los malos olores. La inspectora técnica de obra del área de proyectos de la sanitaria, Francisca Monrroy, señaló que el uso indebido de los colectores es uno de los principales factores que aceleran el deterioro de las infraestructuras “cada vez son más habituales los reboses de colectores debido al mal uso, durante los trabajos de limpieza y mantención hemos encontrado desechos como toallas húmedas, pañales, restos de ropa y aceite domiciliario en grandes cantidades, lo que provoca un deterioro más rápido de la vida útil del alcantarillado, generando problemas como obstrucciones y malos olores”.
La adecuada disposición de los residuos y el trabajo conjunto con la ciudadanía son esenciales para mantener la efectividad de estas nuevas tecnologías y prolongar la vida útil de los tramos, mejorando la calidad de vida de los habitantes de la región y contribuyendo al cuidado de nuestro entorno.
Fuente: Nueva Atacama