El ente público que coordina los transportes públicos de la región de París, denominado Île-de-France Mobilités (ÎDFM), alertó hoy de un deterioro “preocupante” del servicio de muchas líneas, que en casos como el del metro afectan a casi la mitad de las rutas, a solo ocho meses de los Juegos Olímpicos.
La evaluación se basa en los datos de puntualidad de los trenes de cercanías y del metro de este octubre, que muestran “una nueva degradación preocupante de los servicios de transporte” tras las mejoras que se habían visto la primavera pasada.
En un comunicado, IDFM consignó que la del metro es una “situación degradada que perdura”, con solo cuatro de catorce líneas arrojando resultados superiores o iguales a los objetivos marcados, mientras que otras cuatro se acercan mucho sin llegar a lograrlos.
A las otras seis líneas las considera “en dificultades”, que son especialmente serias en el caso de cinco de ellas, ya que el metro tiene una tasa de puntualidad inferior al 85%.
Son tasas de irregularidad “que no existían antes del covid”, remarcó IDFM.
El análisis de los problemas de regularidad “muestra que, a pesar de las contrataciones masivas, la indisponibilidad de los conductores (absentismo, enfermedad, etc.) es la principal causa de los trenes cancelados. En algunas líneas, representa casi el 50% de la producción no realizada”, según el comunicado.
IDFM también imputa los apuros del subterráneo parisino a los problemas de mantenimiento de las vías y de los vehículos y señala que el deterioro del servicio tiene “consecuencias importantes” en la salud de los viajeros.
“Hasta un 10% de los trenes anulados se cancelan por indisposiciones de los pasajeros en la línea 7”, ejemplificó.
Asimismo, la presidenta de IDFM, Valérie Pécresse, instó a la empresa pública gestora de la red de metro, RATP, a desplegar el conjunto de trenes de metro adquiridos, tal y como su presidente, Jean Castex, se comprometió el pasado verano.
Respecto a los cercanías, el ente coordinador de los transportes señaló que hay cinco líneas con problemas, aunque en dos casos los considera coyunturales, y ocho próximas a los objetivos.
Esta evaluación negativa llega en un momento en el que los transportes parisinos han sido foco de atención mundial tras el anuncio la semana pasada de que Île de France aumentaría en torno al 100 % el precio de varias de las tarifas de transporte entre el 20 de julio y el 8 de septiembre de 2024, periodos que coinciden con los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París.
La subida afecta, por ejemplo, a la tarifa semanal para París y toda su región, que pasa de los actuales 30 euros a 70, mientras que los billetes individuales de metro y autobús pasarán de 2,10 euros a 4. IDFM también aseguró que los viajeros habituales se evitarán esta subida con los abonos mensuales o comprando billetes con antelación.
Paralelamente a ese anuncio, la alcaldesa parisina, la franco-española Anne Hidalgo, y el Gobierno francés cruzaron acusaciones precisamente por la calidad de los transportes.
Según Hidalgo, los transportes, que no son de su competencia, no estarán preparados para acoger a tantos usuarios en 2024, mientras que el ministro de Transporte, Clément Beaune, denunció “una traición política” por parte de la regidora.
Emol